A lo largo de los siglos, los ireanos han sido una raza maltratada por hurgos y badroks, debido a sus convicciones y creencias. Los ireanos no creen en el belicismo ni en la resolución de conflictos mediante la fuerza. Son pacíficos y de carácter abierto. No suelen levantar la voz y sus convicciones religiosas están muy arraigadas. Físicamente son corpulentos; tanto los hombres como las mujeres y de expresión ruda; contradiciendo totalmente a su carácter afable y servicial. A lo largo de su historia han sido esclavos de hurgos y de badroks, ya que al no ser un pueblo agresivo ni contar con su propio ejército, siempre ha sido un blanco fácil de conquistadores externos.
Iréana es una nación rica en minerales y sus herreros son reconocidos en todos los Reinos de la Luz. De hecho, los Caballeros de Beldor visten armaduras y utilizan espadas y lanzas forjadas en Iréana.
Los ireanos son también hábiles negociadores. Sin embargo, al amar la paz y aborrecer el conflicto como ellos lo aborrecen, suelen dejarse embaucar cuando su interlocutor es más agresivo. También son reconocidos como mercaderes.
Hábiles artesanos, no solo en el metal, los ireanos rivalizar con los enanos al trabajar otras materias primas, por ejemplo, la madera. Muchos de los barcos que navegan por el mundo son fabricados en Iréana, ya que el clima cálido de la nación y sus alto índices de humedad facilitan el crecimiento de los bosques y la regeneración de sus árboles. Del mismo modo que sus armas y armaduras, los navíos de los Caballeros de Beldor son ireanos.
-Apariciones: La forja del destino
Forjado en lágrimas
Forjado en sangre
-Raza: Humana
-Complexión: Corpulenta
-Nación: Iréana (Reinos de la Luz)
Etiquetas: Taldhim, Nathaniel Wylder, La forja del destino
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